En la muerte de José Enrique Rodó.
En la quieta impostura virginal de la noche
que cobija el amor con su tenue derroche
...
Ya brotas de la escena cual guarismo
tornasol, y desfloras el mutismo
con los toques undívagos de tu planta certera
...
Encima
de la azucena esquinada
que orna la cadavérica almohada;
encima
...
Me impongo la costosa penitencia
de no mirarte en días y días, porque mis ojos,
cuando por fin te miren, se aneguen en tu esencia
...
Delinquiría
de leso corazón
si no anegara con mi idolatría,
en lacrimosa ablución,
...
Volando del vértice
del mal y del bien,
es independiente
la saltapared.
...
Tarde de lluvia en que se agravan
Al par que una íntima tristeza
Un desdén manso de las cosas
...
A la cálida vida que transcurre canora
con garbo de mujer sin letras ni antifaces,
a la invicta belleza que salva y que enamora,
...
Huérfano quedará mi corazón
Alma del alma, si te vas de ahí,
Y para siempre lloraré por ti
...